viernes, 31 de diciembre de 2010

Últimos suspiros del año.

¡Oh, Capitán, mi Capitán!:
nuestro azaroso viaje a terminado.
Al fin venció la nave y el premio fue ganado. [...]
Walt Whitman.

      Este año llega en unas horas a su fin y al igual que todos los años toca hacer recuento de todo lo bueno que hemos obtenido. No se me ocurre mejor forma de despedir el año que con unos versos que Walt Whitman escribió en homenaje a Abraham Lincoln.
      Efectivamente, nuestro azaroso viaje por el 2010 ha terminado, pero comienza otro con nuevas esperanzas, con nuevas tierras que ganar, nuevos soles que ver despertar...
      El motivo que me ha impulsado a escribir esta última entrada del año es la película de El club de los poetas muertos, la cual sigue dejando huella cada vez que la veo.
      La historia se sitúa en una de las academias más prestigiosas de Estados Unidos, John Keating es el nuevo profesor de literatura y a sus alumnos les cita el poema cuyos tres primeros versos he escrito al principio del artículo. Este profesor ayuda a sus alumnos a descubrir sus propios caminos, rompiendo con algunas pautas de la escuela tradicional.

     El profesor, con su enseñanza, pretende crear librepensadores. Con el tópico del Carpe Diem les explica el sentido de la vida, pero que no es sólo una frase, sino que para hacer uso de ella hay que usar la razón y tener la capacidad de anticiparse a las consecuencias. Estos estudiantes no desecharán en ningún momento las enseñanzas del profesor Keating y harán del Carpe Diem un arma contra la situación opresora.

    En esta película llena de mensajes encontramos incluso una pequeña similitud con el final de la obra titulada Las desventuras del joven Werther, de Goethe. La película refleja la pérdida de la calma, característica de los románticos. Un pequeño guiño, a mi parecer, a esa obra literaria perteneciente al movimiento del "Sturm and Drang" alemán. El Romanticismo no es un mero concepto teórico que hoy nos hacen estudiar, es una actitud frente a la vida.

    Profesor Keating: "No olviden que a pesar de todo lo que les digan, las palabras y las ideas pueden cambiar el mundo (...). Les contaré un secreto: no leemos y escribimos poesía porque es bonita. Leemos y escribimos poesía porque pertenecemos a la raza humana; y la raza humana está llena de pasión. La medicina, el derecho, el comercio, la ingeniería... son carreras nobles y necesarias para dignificar la vida humana. Pero la poesía, la belleza, el romanticismo, el amor son cosas que nos mantienen vivos".


domingo, 26 de diciembre de 2010

Dante Alighieri.

...e lo spirito lasso
conforta, e ciba di speranza buona.

...y el ánimo cansado,
de esperanza feliz nutre, y conforta;

Divina Comedia, canto 8.º del "Infierno".

lunes, 20 de diciembre de 2010

Azul cielo.

      Abro la ventana y me envuelve un torbellino de frío, saco la cabeza para sentir el aire y parece que chispea. Las nubes pasan ligeras huyendo de un claro que a lo lejos se aproxima.

      El azul cielo que llega, las nubes que pasan. Un simbólico futuro y pasado que desde las alturas cae hasta aquí. El futuro persigue al pasado para relegarlo a un segundo plano, y yo aquí, desde mi ventana, mirando el azul cielo.

martes, 30 de noviembre de 2010

        Hoy me he despertado asustada por el despertador, como de costumbre. Siempre lo dejo en el otro lado de la habitación para tener la obligación de levantarme a apagarlo cuando suena.
Me he vestido corriendo y mientras comía una galleta a toda prisa buscaba mi bota derecha. ¡No puedo salir a la calle con un zapato solamente! Son las ocho menos cuarto y aún sigo en casa corriendo de un lado para otro como una loca. Cojo las llaves, la mochila y el bonobús, y salgo dando una carrera para evitar que se me vaya el autobús.

        Mientras esperaba que el semáforo me diese paso, observo con cara de idiota al autobús que pasa de largo.
¡Genial!, ahora toca esperar con este frío. En cinco minutos llegó el siguiente, pero el frío y las gotitas de lluvia helada ya me hacían tiritar.
Me subo al bus y va hasta la cúpula de gente. Estudiantes medio dormidos y señoras que van al ambulatorio en grupo de cinco o seis. Yo, sinceramente, no sé en qué grupo ubicarme ya que por el dolor de espalda por culpa de la mochila parezco toda una señora con sus achaques.
A los diez minutos bajo de un autobús para subir a otro y, con suerte, llegaré a la facultad en otros diez minutillos.

        Al llegar a la universidad, me dirijo al banquito donde siempre hacemos tiempo una compañera y yo hasta que empieza la clase. Llego al banco, saludo a mi amiga e inmediatamente empezamos con las risas. Nos quejamos un ratito sobre las carreras que nos pegamos todas las mañanas para ir a la facultad y entramos a clase a las 9 menos diez para coger un buen sitio... un buen sitio donde pasar desapercibidas, sí, toca latín.
Son las 9 casi y cuarto, y por fin llega el profesor con su sonrisa y su "buenos días".
Nos da la noticia de que la clase terminará media hora antes. Mi amiga y yo nos miramos sonrientes,  y rompimos en una carcajada.
No nos enteramos de que cuando hay latín a primera hora nos podemos tomar el despertar con algo más de calma.

domingo, 28 de noviembre de 2010

La vuelta de Martín Fierro; versos del 4349 al 4360.

Moreno, voy a decir
sigún mi saber alcanza:
el tiempo sólo es tardanza
de lo que está por venir;
no tuvo nunca principio
ni jamás acabará.

Porque el tiempo es una rueda,
y rueda es eternidá;
y si el hombre lo divide
sólo lo hace, en mi sentir,
por saber lo que ha vivido
o le resta por vivir.

Martín Fierro. José Hernández.

martes, 16 de noviembre de 2010

Después de haber cursado bachillerato de ciencias de la salud, sí, estoy matriculada y cursando Filología Hispánica; y al igual que a muchos de los estudiantes, que también han estudiando esta carrera o están en proceso, me han hecho la típica pregunta de: "¿y eso para qué sirve?"

"A mí sinceramente, me sirve para ser feliz haciendo algo que me gusta", esta es mi respuesta.

domingo, 17 de octubre de 2010

Me siento bien.

Hoy, al igual que todos los días que camino sola por la calle o voy en autobús, llevaba puesto los auriculares de mi mp3. Voy caminando sin querer al ritmo de la música, como creyendo estar en un videoclip.
Me cruzo con varias personas que me sonríen ... quizás vaya sonriendo por la calle mientras suenan las canciones.
Esa sonrisa tonta e inconsciente que aparece en mi cara de vez en cuando. Llevo varios días vistiendo esa sonrisa sin preocupaciones.

sábado, 25 de septiembre de 2010

S.E.V.I.L.L.A.

Una imagen vale más que mil palabras y aquí dejo tres fotografías realizadas por mí.
1. Giralda y parte de la Catedral.














2. Río Guadalquivir y puente de Triana.















3. Parte superior de la Giralda vista desde el Patio de Banderas del Alcázar.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Azar.

Sacas la moneda de tu bolsillo, miras a tu alrededor y compruebas que no tienes nada que perder.
Observas de manera atenta la moneda que reposa sobre tu mano.
Adjudicas en silencio una decisión a cada cara de la moneda, que ahora brilla con la luz del sol.
La tiras al aire y en un anhelo oculto esperas cara ... o quizás cruz ...
¿Tú dejarías ciertas situaciones a un cara o cruz?
Yo sí.

martes, 17 de agosto de 2010

Me recuerda las mañanas de París.

Sevilla. Doce de la mañana. Está nublado y chispea de vez en cuando. Apenas 25ºC nos cubren.
Cuesta creer que estemos en un mes de agosto sevillano.
Sí, me recuerda a París. Esa ciudad es así de especial y cautivadora. Echo de menos levantarme por las mañanas a las 7, abrir la ventana de mi habitación, dar los buenos días a la torre Eiffel, ponerme la sudadera y bajar calentita a desayunar.
Creo que todos los que vinieron conmigo a París están viviendo esta mañana nublada con la misma nostalgia que yo.

                                                    "Siempre nos quedará París".
                                                   Os quiero y os echo de menos.

domingo, 15 de agosto de 2010

El sentimiento de las palabras.

"Si el hombre pudiera decir lo que ama..."

        Este es el primer verso de una de las poesías de Luis Cernuda, bajo mi punto de vista define muy bien la Lírica en general, a través de las palabras los autores materializan sus pensamientos y sentimientos.
        Es una forma de hacerlos reales, palpables...
Es la puesta en escena, a través de las letras, de los sentimientos más profundos que no podemos o no sabemos expresar cara a cara, ya sea por orgullo, por vergüenza, por cobardía o por culpa.

sábado, 14 de agosto de 2010

Cuanta verdad en tan pocas palabras.

"Cuando los trabajos pasados se cuentan en prosperidades presentes, suele ser mayor el gusto que se recibe en contarlos, que fue el pesar que se recibió en sufrirlos."
Miguel de Cervantes. Los trabajos de Persiles y Segismunda.

Quizás necesitamos un empujón en esos malos momentos en los cuales todo es tan difícil.
Quizás unas buenas palabras en el instante adecuado pueden hacer que nos demos cuenta (con algo de tiempo) de lo que realmente merece la pena.

domingo, 27 de junio de 2010

Vuelvo a tener tiempo para leer.

El Asedio de Arturo Pérez-Reverte es la nueva aventura en la que me quiero sumergir.
Autor: Arturo Pérez-Reverte nació en Cartagena en 1951, fue reportero de guerra durante veintiún años y es autor, entre otras novelas, de El húsar, El maestro de esgrima, La tabla de Flandes, Territorio Comanche, La piel del tambor, La carta esférica, La Reina del Sur, Cabo Trafalgar, El pintor de batallas y Un día de cólera; y de la serie histórica Las aventuras del capitán Alatriste.
Es miembro de la Real Academia Española.



Libro: Cádiz, 1811. España lucha por su independencia mientras América lo hace por la suya. En las calles de la ciudad más liberal de Europa se libran batallas de otra índole. Mujeres jóvenes aparecen desolladas a latigazos. En cada lugar, antes del hallazgo del cadáver, ha caído una bomba francesa. Eso traza sobre la ciudad un mapa superpuesto y siniestro: un complejo tablero de ajedrez donde la mano de un jugador oculto -un asesino despiadado, el azar, las curvas de artillería, la dirección de los vientos, el cálculo de probabilidades- mueve piezas que deciden y entrelazan el destino de los protagonistas: un policía corrupto y brutal, la heredera de una importante casa comercial gaditana, un capitán corsario de pocos escrúpulos, un taxidermista misántropo y espía, un curtido guerrillero de las salinas y un excéntrico artillero francés a quien las guerras importan menos que resolver el problema técnico del corto alcance de sus obuses.

sábado, 26 de junio de 2010

Había una vez un circo.

No puedo evitar sentirme como una marioneta cuando escucho, veo o incluso digo algo.
Estamos desvirtuando la expresión "ser uno mismo", estamos siendo lo que los demás quieren que seamos.

Me canso de dar un paso tras otro y tener que mirar la expresión en el rostro de la gente para comprobar si lo estoy haciendo bien o mal y poder continuar.
Estoy cansada de tener que callarme la mitad de lo que pienso sólo porque a algunas personas no les gusta.
Estoy harta, al igual de muchos de ustedes, de ser movida por hilos desde arriba.
Cojamos las tijeras y empecemos a cortarlos.

miércoles, 23 de junio de 2010

El billar de la vida.

Nacer, crecer, relacionarse, reproducirse y morir.
La vida con mayúsculas debe ser algo más que un ciclo biológico.

Me gusta convertir todo lo que hago en un juego, algo así como una partida de billar. El momento en que golpeas la bola blanca pasa a ser el punto de partida.

Al introducir con habilidad una de las bolas, ya sea lisa o rayada, en uno de los agujeros hemos marcado el curso de la partida, al igual que las decisiones van clareando u oscureciendo nuestro caminar.

La palabra exacta es VIVIR; siente, ríe, llora, decide y disfruta como si no hubiese mañana. Convierte todo en un juego y realiza la partida de tu vida. Ve agotando las bolas de tu billar dejando la bola negra hasta el final. Si llegas a ella ganaste el juego. Siéntete orgulloso/a de la partida que realizaste porque la bola negra marca el fin igual que la muerte oscura nos quitará la idea de una posible revancha.

lunes, 21 de junio de 2010

Ese fuego es su alimento.

Mi abuela tenía una teoría muy interesante; decía que todos nacemos con una caja de fósforos adentro, pero que no podemos encenderlos solos... necesitamos la ayuda del oxígeno y una vela. En este caso el oxígeno, por ejemplo, vendría del aliento de la persona que amamos; la vela podría ser cualquier tipo de comida, música, caricia, palabra o sonido que engendre la explosión que encenderá uno de los fósforos. Por un momento, nos deslumbra una emoción intensa. Una tibieza placentera crece dentro de nosotros, desvaneciéndose a medida que pasa el tiempo, hasta que llega una nueva explosión a revivirla.
Cada persona tiene que descubrir qué disparará esas explosiones para poder vivir, puesto que la combustión que ocurre cuando uno de los fósforos se enciende es lo que nutre al alma. Ese fuego, en resumen, es su alimento. Si uno no averigua a tiempo qué cosa inicia esas explosiones, la caja de fósforos de humedece y ni uno solo de los fósforos se encenderá nunca.
Laura Esquivel. Como agua para chocolate.

José Saramago nos ha dejado.


JOSÉ SARAMAGO, DESCANSE EN PAZ.

"….a decir verdad, nosotros, los humanos, no podemos hacer mucho más que sacarle la lengua al verdugo que nos va a cortar la cabeza, será por eso que siento una enorme curiosidad por saber cómo va a salir del lío en que está metida, con esa carta que va y viene y de ese violonchelista que ya no podrá morir a los cuarenta y nueve porque ya ha cumplido los cincuenta. La muerte hizo un gesto de impaciencia, se sacudió bruscamente del hombro la mano fraternal con la que la consolábamos y se levantó de la silla. Ahora parecía más alta, con más cuerpo, una señora muerte como debe ser, capaz de hacer temblar el suelo bajo sus pies, con la mortaja arrastrando y levantando humo a cada paso. La muerte está enfadada. Es el momento de sacarle la lengua." (J.Saramago. Las intermitencias de la muerte).

"El alma humana es una caja de donde siempre puede saltar un payaso haciendonos mofas y sacándonos la lengua, pero hay ocasiones en que ese mismo payaso se limita a mirarnos por encima del borde de la caja, y si ve que, por accidente, estamos procediendo según lo que es justo y honesto, asiente aprobadoramente con la cabeza y desaparece pensando que todavia no somos un caso perdido." (J.Saramago. El hombre duplicado).